Pedro Galdón.- Vecinos de la urbanización Baraure Centro de la ciudad de Araure denunciaron que, debido a serias obstrucciones de muchos ramales y bocas de visita del sistema de aguas servidas de la comunidad, las aguas negras corren libremente y/o llenan un buen número de veredas y caminos que atraviesan a la misma desde hace varios meses atrás, lo cual constituye, más que una mera incomodidad y molestia, un serio problema para la salud de los residentes afectados por las mismas.
Uno de los habitantes perjudicados, cuyo nombre quiso dejar en el anonimato, manifestó que uno de los botes de aguas residuales más serios, posiblemente causado por la rotura de una tubería y cuyo epicentro se encuentra junto a la Calle 4 y próximo a su casa, ha estado causándoles serios inconvenientes a los que viven a su alrededor desde hace unos dos o tres meses, regando profusamente el pestilente líquido por los costados de la vía, las aceras y veredas cercanas y el canal contiguo a esa zona, y diseminando sus insoportables olores por doquier.



Aseveró que este bote originó, como un «efecto dominó», otras obstrucciones en las cañerías que pasan por las veredas circunvecinas y provocó que una pequeña porción de la mentada calle se rompiera por los embates del agua residual, creando un hueco de significativo tamaño que casi fue el motivo de un accidente automovilístico recientemente; y que está siendo un «caldo» de enfermedades para quienes hacen vida en sus proximidades.

Asimismo, otro de los perjudicados, Diógenes Alfonso, expresó que, como resultado de la gran longevidad de la urbanización y su arquitectura y del ineficiente o la falta de mantenimiento al sistema de aguas negras por parte del gobierno municipal, la comunidad ha estado presentando estos problemas con regularidad desde hace varios años atrás, y que, en este momento, los habitantes de las zonas aledañas a las desembocaduras cloacales principales, en especial los que viven en las veredas, estén bregando constantemente a sotavento, en algunos casos, desde hace siete meses, con estas estomagantes efusiones resultantes de este gran colapso; y que esto ha sido motivo de gran preocupación para los habitantes por la salud de sus niños, de los estudiantes que asisten a los preescolares y a las escuelas existentes en el sector, y de sus ancianos, por la cada vez mayor propensión de ellos de contraer severas enfermedades por su continua exposición a las aguas servidas y a sus olores.





Declaró que ellos en numerosas ocasiones han denunciado estos problemas ante el consejo comunal del sector, a Hidrosportuguesa y a la Alcaldía del Municipio Araure, exigiéndoles que se embarquen en su resolución. No obstante, y como también indicó el declarante anónimo, todos los entes han dicho que se avocarán a la solvencia de la problemática en otro momento, alegando como excusas la falta de recursos, maquinaria y/o presupuesto para ello, y alargando, por tanto, este intolerable suplicio por más tiempo; y que, muy probablemente, si el gobierno atiende sus llamados, tratará, en lugar de atacar el problema enteramente, «tapar el sol con un dedo», colocando un «aliviador» que terminará siendo inefectivo, incluso, para aligerar la carga del vetusto sistema comunitario de aguas negras.
Ambos denunciantes hicieron un llamado a los entes gubernamentales a que se avoquen realmente a solucionar este grave problema de insalubridad que, si no se atiende, podría afectar a las más de 650 familias que habitan en Baraure Centro; y que ellos hagan apropiadamente su trabajo, para ponerle fin a esta larga «flagelación».

