CARACAS.- El presidente Nicolás Maduro arremetió contra el cardenal Baltazar Porras acusándolo de haber conspirado «junto a su cofradía» para supuestamente impedir la canonización del Dr. José Gregorio Hernández, en medio del clima de fervor religioso por la reciente proclamación del «médico de los pobres» como santo.
Durante un acto en la llamada Sala de autogobierno de la Comuna Las 8 Raíces, en Los Mecedores, Caracas, el mandatario afirmó que «se conspiró mucho contra la santificación de José Gregorio Hernández».
«Algunos curas, como Baltazar Porras, dedicaron su vida para evitar su canonización, pero han sido derrotados por Dios. Tenemos a San José Gregorio Hernández, muy a pesar de Baltazar Porras y de su cofradía», declaró Maduro, según la transmisión de Venezolana de Televisión (VTV).
Sostuvo que «sabe mucho más del caso» y reiteró que el proceso de canonización fue «saboteado durante muchos años por estos grupos». Según dijo, «la curia conspiró para frenarlo» desde los primeros intentos, que se remontan a 1949.
Por su parte, Maduro recordó su encuentro con el papa Francisco en 2013, en el que -según afirmó- le relató «la fe del pueblo venezolano en José Gregorio Hernández» y le entregó una imagen del beato elaborada por artistas trujillanos.
«Decían que no había un milagro que certificara la santidad de José Gregorio. Bueno, vayan a la Candelaria y pregunten allá a los devotos, miles de experiencias van a encontrar, verdaderos actos de fe», agregó.
Las declaraciones de Maduro se producen apenas un día después de la canonización del Dr. José Gregorio Hernández y la madre Carmen Rendiles, celebrada en Roma por el papa León XIV.
Desde Italia, el cardenal Baltazar Porras, quien ha sido un motor importante en la canonización del «médico de los pobres», denunció la «militarización» de Venezuela, la persecución a la disidencia y la violación de derechos humanos de los presos políticos, calificando la situación del país como «moralmente inaceptable».
Durante su intervención en la Pontificia Universidad Lateranense, Porras aprovechó para levantar la voz por Venezuela, al recordar la grave situación social que enfrenta el país, con pobreza creciente, limitación de libertades, corrupción y falta de autonomía de los poderes públicos, afectando la convivencia pacífica de los venezolanos.
«Vivimos en una situación moralmente inaceptable; la merma del ejercicio de la libertad ciudadana, la militarización como forma de gobierno, la corrupción y la falta de autonomía de los poderes públicos configuran un panorama que no ayuda a la convivencia pacífica», dijo el cardenal.
Así como en esta oportunidad, Porras ha alzado la voz por la democracia en el país, aspecto criticado duramente desde las filas del oficialismo. /Versión Final