ESPECIAL. – feligresía de Parroquia Catedral Nuestra Señora de la Corteza, se volcó al templo sagrado para ser protagonista de la solemne eucaristía del Domingo de Ramos, reconocida por la iglesia católica como la entrada triunfal de Jesucristo a Jerusalén.
La ceremonia inició con la tradicional bendición de las palmas, por parte de Monseñor Gerardo Salas Arjona, obispo de la Diócesis de Acarigua-Araure, en compañía del Pbro. Luis Rangel, acto seguido que dió paso a la santa misa de ramos.
Las sagradas escrituras de este domingo, correspondieron al evangelio de Mateo 26, 14-27,66 homilía proclamada por Monseñor Obispo, el cual hizo énfasis en tres enseñanzas: La primera, basada en el júbilo y la alabanza, el contraste
que nos demuestra Nuestro Señor que así como en aquella época lo aclamaron, a su vez, pidieron su crucifixión, nosotros asimismo podemos aclamarle y rechazarle; es el misterio de la libertad humana que tiene la triste posibilidad de rechazar la gracia Divina.
Una segunda enseñanza, que invita a reconciliarnos con Dios, que él haga su voluntad y habite en nosotros para hacer el bien, que todos seamos una familia, una comunidad.
Jesús invita a no andar indiferentes por el mundo, que tengamos el rostro de la sencillez y la humildad.
Por último, el Señor nos invita a orar, para crecer en el camino personal del calvario.
La entrada triunfal de Jesús en Jerusalén pide de nosotros coherencia y perseverancia, pide que transformemos nuestro corazón para que ayudemos a transformar el corazón de los demás./Prensa Catedral Mayami Alvarado
Monseñor Gerardo Salas Arjona en la Santa Misa del Domingo de Ramos: «Jesús nos invita a tener el rostro de la sencillez y la humildad»

