SANTIAGO.- Los chilenos dijeron «Rechazo» a la nueva Constitución, propuesta para sustituir el actual texto, favorable al mercado y que data de la dictadura de Augusto Pinochet. Con el 72,20% de los votos, el 62,20% de los electores dijeron «No» al proyecto, mientras que el 37,80% le dio su aprobación. Más de 15 millones de ciudadanos estuvieron habilitados para participar en el plebiscito obligatorio.
Los chilenos dijeron «Rechazo» a la nueva Constitución
Con 34.139 mesas escrutadas, correspondiente al 88,08% de los votos, el ‘Rechazo’ se impone con 62% de los votos sobre el ‘Apruebo’ que se lleva el 38% de los votos.
Así, Chile decidió no adoptar el nuevo texto de la Constitución por una amplia mayoría. La diferencia de cerca de más de 2,5 millones de votos del ‘Rechazo’ sobre el ‘Apruebo’ es mayor a la estimada por encuestas y múltiples analistas.
Los resultados del plebiscito dejan en pie a la Constitución adoptada en 1980 durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Los detractores de la nueva Carta Magna reaccionaron celebrando la victoria del ‘Rechazo’.
Chile rechaza el nuevo texto de la Constitución con amplia mayoría
Con 8.609 mesas escrutadas, correspondiente al 48,01%, el ‘Rechazo’ se impuso con 62,55% de los votos sobre el ‘Apruebo’ que se lleva 37,45% de los votos.
El ‘Rechazo’ continúa venciendo al ‘Apruebo’
Con 8.915 de las mesas escrutadas, el 23%, el ‘Rechazo’ se lleva 37,02% de los votos y el ‘Apruebo’ un 62,98% de los votos.
La opción del ‘Rechazo’ se impone sobre el ‘Apruebo’, según resultados preliminares
Con 2.481 mesas escrutadas, el 6,40%, el ‘Rechazo’ se impone con 62,96% de los votos. Mientras que el ‘Apruebo’ se lleva 37,05% de los votos.
El ‘Apruebo’ vence en el extranjero
Con el 61,05% de las mesas del exterior escrutadas, el ‘Apruebo’ se lleva el 69% de los votos y vence al ‘Rechazo’ con 31% de los votos.
Chile cierra las urnas y comienza el conteo de votos
A las 6 p.m (hora local) comenzó el cierre oficial de las mesas de votación y se dio inicio al conteo de votos.
La población carcelaria vota por primera vez en Chile
Este año se hizo efectiva por primera vez la norma instaurada en la actual Constitución chilena que indica que las personas privadas de la libertad, pero por delitos menores que conlleven penas inferiores a tres años de cárcel, tienen derecho a votar.
Aunque se trata de una normativa de larga data, no había sido puesta en práctica, debido a que los reclusos no podían trasladarse a los centros de votación en los que estaban inscritos cerca a sus viviendas.
Sin embargo, a finales de 2021 la Corte Suprema emitió un fallo que ordena que los presos puedan registrar la dirección de las cárceles en que se encuentran como su actual lugar de residencia. Por tanto, para esta consulta fueron trasladadas urnas a catorce prisiones del país, dando lugar a un voto inédito en la nación.
Entre los detenidos que cumplen con los requisitos para acceder al sufragio, alrededor de 1.000 fijaron su domicilio electoral en los establecimientos penitenciarios, por lo que estuvieron habilitados para participar en esta histórica jornada.
La opción ‘Apruebo’ va ganando en algunos países, según sondeos preliminares
El conteo a boca de urna en 10 naciones que ya cerraron las mesas de votación indica que la opción que respalda la aprobación de la nueva Constitución lleva la delantera hasta el momento, con alrededor del 67% de los votos.
En cambio, la elección de ‘Rechazo’ alcanza el 33% de los sufragios. Los datos han sido publicados en plataforma DecideChile, de la empresa de big data Unholster.
De forma específica, en Nueva Zelanda, según datos aún no corroborados por el Gobierno chileno, se habría impuesto el ‘Apruebo’ con el 75.8% , frente al 24.2% de quienes optaron por refutar la propuesta.
Otro ejemplo del respaldo en el extranjero es Australia. Allí, según el sondeo preliminar, el 66.8% de los votantes se inclinaron de forma positiva hacia la Carta Magna. El texto sometido a consulta fue rechazado por el 33.2%.
El diario ‘La Tercera’ resalta que en Japón la nueva Constitución fue avalada por el 67.4%. Y en Corea del Sur, los chilenos se pronunciaron a favor con el 63.7%.
«En Chile se vive un proceso de redemocratización del debate público»
En entrevista con France24, Lucia Miranda Leibe, académica de la Universidad Católica Silva Henríquez en Chile, se refirió a la polarización en torno al nuevo texto de la Ley Fundamental.
La experta destacó que el debate de la nueva Carta Magna ha generado una “repolitización y redemocratización en el debate”, algo que el país no había logrado reinstalar desde el regreso de la democracia.
En ese sentido, afirma, resulta esperable que la discusión visibilice posturas contrarias.
Sin embargo, aseguró que en caso de que la opción del ‘Rechazo’ se imponga este 4 de septiembre en las urnas, solo se abriría un periodo de mayor incertidumbre.
Quedaría esperar, recordó, el llamado del presidente Gabriel Boric a un nuevo proceso constituyente para afinar o ajustar los asuntos que más generan reticencia.
Los temas que más han causado división y controversia giran en torno a la autonomía de los pueblos indígenas y el reconocimiento a su sistema de Justicia.
“Nuestro destino está en manos de todos”: Bachelet
Países como Italia y Suiza cerraron urnas y procedieron al conteo de sufragios. Justamente, en Ginebra votó la expresidenta del país y quien esta semana finalizó sus cuatro años como Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet.
Tras depositar su papeleta, Bachelet, que a diferencia de los otros tres exmandatarios vivos del periodo post dictadura ha expresado abiertamente su voto por el ‘Apruebo’ en esta consulta, urgió a los ciudadanos a participar «porque está en manos de todos nuestro futuro, nuestro destino».
«Hay demandas ciudadanas muy sentidas por mucho tiempo y se busca, a través de este proceso, encontrar mejores respuestas, y por eso es fundamental que los chilenos vayan (a las urnas)”, expresó.
La líder política agregó que regresará pronto a su país y que en caso de que gane el ‘Rechazo’, se inclinaría por una nueva Convención Constituyente.
En la mesa 1 de la ciudad suiza donde sufragó la exjefa de Estado ganó la opción ‘Apruebo’, con 201 sufragios frente a 74 de la opción Rechazo.
Con participación masiva y normalidad transcurre la jornada electoral
En el interior y exterior de los colegios electorales se observan largas filas y un proceso fluido, destacan las autoridades.
Además de los cerca de 15 millones de chilenos convocados a participar en el referéndum obligatorio, también están llamados a votar 514.000 extranjeros. Son 125.000 más de los censados en 2019, fecha en la que se desencadenó el «estallido social» que impulsó el proceso.
Se trata de una parte de la población que podría tener una incidencia clave en el resultado que se prevé ajustado.
Sin embargo, el Servicio Electoral de Chile (Servel) también informó que se registra gran afluencia de público para excusarse de no participar. Entre las principales razones expuestas están: contar con licencia médica, encontrarse en una ciudad distinta al lugar de votación en el que están registrados y otros impedimentos considerados importantes.
Sin embargo, «la única excusa que se requiere el día de hoy para asistir a la comisaría es que estén a más de 200 km de distancia de su lugar de votación, ninguna otra más», replicó la ministra vocera del Gobierno, Camila Vallejo.
La Policía de Carabineros informó que más de 55.000 personas han presentado excusas para no participar en el plebiscito.
Según las disposiciones del Gobierno, todos los ciudadanos que se encuentren en la fila a la hora del cierre podrán ejercer su derecho al voto, lo que podría retrasar el escrutinio, programado para las 6 de la tarde, hora local.
Está previsto que los resultados sean entregados dos horas después.
Expresidente Piñera hizo un llamado a la unión durante su votación
«Llevamos demasiado tiempo de confrontación, violencia. Sólo con unidad vamos a poder construir la casa de todos», declaró el exmandatario, Sebastián Piñera en el momento de votar.
El político conservador aseguró también que el país necesita una nueva Constitución, y que ésta sería «la oportunidad de una vida más feliz».
Para el expresidente, el plebiscito de hoy tiene un sabor especial. En octubre de 2019, gran parte de la población chilena salió a las calles para oponerse a su gobierno, y Sebastián Piñera, incapaz de detener las protestas, decidió iniciar un proceso constitucional, con vistas a rediseñar el Estado, con más derechos sociales y mayor participación democrática.
Aunque no la ha hecho público, dejó entrever su posición en contra del nuevo texto al seguir las directrices de la campaña del «no».
El presidente Boric vota en Magallanes: «Éste es un momento histórico»
Es el momento de «escribir nuestra historia» declaró el mandatario tras depositar su sufragio. Acompañado de su pareja, Irina Karamanos, sus padres y uno de sus dos hermanos, votó este domingo en la ciudad meridional de Punta Arenas, en el colegio en el que estudió de pequeño, y situado a escasos metros de la casa familiar.
Gabriel Boric, partidario del cambio constituyente, prometió preservar la unidad independientemente del resultado: «Puedo garantizar que nuestra voluntad y nuestra acción independiente de cuál sea el resultado, será convocar a una amplia unidad nacional de todos los sectores, de todas las organizaciones sociales, de la sociedad civil, de los partidos políticos, queremos escuchar todas las voces para poder seguir adelante con este proceso».
Chile vota ante los ojos del mundo entero
«Este es un momento histórico del cual es muy importante que todos y todas independiente de nuestra opción nos sintamos profundamente orgullosos», apuntó el presidente de la República.
También instó a los chilenos a expresarse mediante el voto «con responsabilidad, con calma y con mucha alegría»: «Nos están mirando, desde todo el mundo, ejerzamos nuestro derecho y deber a escribir nuestra historia».
Finalmente, el presidente insistió en que continuará con su agenda durante los tres años y medio que le restan de mandato y no descartó la posibilidad de que haya una reestructuración de Gobierno en los próximos días o semanas.
«Seguir perfeccionando la democracia»
Entre los rostros públicos que abogan por un cambio, se encuentra Michelle Bachelet, – la única ex presidenta viva que apoya el nuevo texto. Desde Ginebra, Suiza, participó en el Plebiscito Constitucional de su país, que significa para ella «que como chilenos somos capaces de seguir perfeccionando la democracia».
Bachelet, quien esta semana finalizó sus cuatro años al frente de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, también pidió a Chile ánimo y entusiasmo a la hora de votar: «Nuestro destino está en las manos de todos».
Casi 3.000 centros de votación
Las urnas estarán abiertas hasta las 18:00 hora local (21:00 GMT) y desde temprano, los ciudadanos hacen largas filas para depositar su voto. El resultado, que se espera muy ajustado, se conocerá un par de horas más tarde.
Algunos centros de votación de fuera del país, como los de Nueva Zelanda, Australia, Japón, Corea del Sur y China, ya se han cerrado y muestran una ventaja favorable al nuevo texto. Sin embargo, los votos de fuera del país son históricamente más progresistas que los del resto del electorado.
Una votación obligatoria
Aunque casi el 80% de los chilenos votó para redactar una nueva Constitución a finales de 2020, las encuestas muestran que el apoyo público al nuevo texto ha ido disminuyendo. Los últimos sondeos realizados antes de un apagón de dos semanas mostraban al «no» en cabeza con un 47%, frente al 38% del «sí» y un 17% de indecisos.
Si embargo, los expertos alertan de que el escenario está abierto porque por primera vez el voto es universal y obligatorio, y hay una gran bolsa de votantes que llevan años ausentes de las urnas.
Un «Estado social y democrático de derecho, plurinacional, intercultural, regional y ecológico»
El nuevo texto propuesto es el resultado de un acuerdo alcanzado para sofocar las violentas protestas contra la desigualdad en 2019. Se centra en los derechos sociales, el medio ambiente, la igualdad de género y los derechos indígenas, y declara a Chile un «Estado social y democrático de derecho, plurinacional, intercultural, regional y ecológico».
Sus defensores dicen que ayudará a crear un Chile «más justo», mientras que sus detractores argumentan que es un texto «radical» y que «no une al país».
De aprobarse, el texto sustituirá a la actual Carta Magna, heredada de la dictadura (1973-1990) y vista por una parte de la sociedad como el origen de las desigualdades del país por fomentar la privatización de servicios básicos, como educación, salud o pensiones. De rechazarse, seguirá vigente la actual Ley Fundamental.
Reuters/ EFE/