NUEVA YORK.- En Missouri, Estados Unidos, un pastor se hizo viral en las distintas plataformas digitales luego de llamar a sus feligreses “tacaños”.
Durante un sermón frente a decenas de asistentes presenciales y virtuales, el religioso Carlton Funderburke no se guardó una sola palabra para expresar su malestar.
Según dijo el propio Funderburke, uno de sus «deseos no cumplidos» por la Iglesia en la que predica el Evangelio, fue no haber obtenido un costoso reloj de la marca Movado que ronda entre los 1.000 y 3.300 dólares.
Si bien los espectadores pensaron que se trataba de una broma, la situación llegó a su punto más tenso cuando calificó a los fieles como “unos pobres arruinados e infelices” por no «honrarlo debidamente» con el lujoso obsequio.
“Todos ustedes saben que pedí uno el año pasado. Ya estamos en agosto y todavía no lo tengo”, agregó el pastor.
En ese orden de ideas, una vez más la Iglesia en EE. UU. se ve envuelta en una polémica debido al diezmo (donación de la décima parte del ingreso mensual de los feligreses para mantener el recinto religioso).
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