WASHINGTON.-La piel es el órgano más grande del cuerpo y su principal objetivo es el de proteger al organismo de factores externos como bacterias, sustancias químicas y temperatura. Así, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., cuando se expone la piel a una temperatura fría, los vasos sanguíneos de la dermis se contraen, lo cual hace que la sangre, que es caliente, no entre a la piel y adquiera la temperatura del medio frío al que está expuesta. En cuanto al calor, se conserva debido a que los vasos sanguíneos no continúan enviando calor hacia el cuerpo.
De esta forma, es muy importante cuidar este órgano de los agentes externos, ya que es el único que está directamente expuesto. El mayor riesgo para la piel es el exceso de luz solar, la cual puede llegar a provocar el envejecimiento prematuro y, en el peor de los casos, cáncer de piel. La contaminación aumenta la presencia de radicales libres y altera la barrera cutánea, entre otros peligros, así como el tabaquismo, cuyos efectos producen un envejecimiento prematuro de la piel y la aparición de mayor densidad de arrugas.
Así pues, hay que seguir una serie de cuidados diarios muy sencillos, pero también muy eficaces, para reducir el riesgo de este tipo de enfermedades.
Limpieza y crema solar, claves para prevenir el cáncer de piel y las arrugas
La medida más importante para prevenir el cáncer de piel y las arrugas es vigilar mucho con la exposición al sol. Así pues, es muy importante ponerse crema solar en la cara durante todo el año, además de otras zonas si se exponen al sol, aunque sea invierno. Hay que aplicarse a diario un protector solar con un FPS de, al menos, 30 y contra rayos UVA. Una crema hidratante con protección solar es el aliado ideal para ponerse cada día. Asimismo, hay que evitar la exposición directa al sol durante el mediodía, sobre todo, entre las 12 y las 16 horas.
Además, hay que limpiarse la cara dos veces al día, mañana y noche, para liberar los poros y prevenir irritaciones, retirar las células muertas, eliminar los restos de sudor y las partículas dañinas de la contaminación ambiental, ayudar a suavizar la tirantez y preparar la piel para una mejor absorción de la crema hidratante.
Otras medidas para prevenir el cáncer de piel
Además de las medidas vistas anteriormente, hay otros consejos que ofrece la Clínica Mayo para evitar los problemas de la piel:
Usar ropa de protección. Se debe cubrir el cuerpo con prendas de ropa que protejan los brazos y las piernas, utilizar sombreros de ala ancha y gafas de sol.
Evitar realizarse rayos UVA. Las luces que se usan emiten radiación UV, la cual puede incrementar el riesgo de padecer cáncer de piel.
Tener cuidado con los medicamentos fotosensibilizantes. Algunos medicamentos como los antibióticos, e incluso algunos de venta libre, pueden hacer que la piel sea más sensible a la luz solar.
Controlar la piel regularmente. Hay que examinarse la piel e informar al médico en caso de que haya cambios en ella.
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