KIEV.- Los misiles rusos volvieron a apuntar a Kiev, esta vez durante la anunciada visita de los líderes africanos.
La delegación impulsa formas de poner fin a la guerra ordenada por Vladimir Putin hace casi 16 meses y garantías para la exportación hacia su continente de granos y fertilizantes de los dos países en guerra.
Pero las alertas de ataque aéreo y al menos dos explosiones que sacudieron a la capital ucraniana este viernes 16 de junio fueron un recordatorio de los desafíos de su misión.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, confirmó que una de las detonaciones se registró en el distrito de Podilskiy, uno de los barrios más antiguos de la ciudad.
“Los misiles rusos son un mensaje para África: Rusia quiere más guerra, no paz”, subrayó por su parte el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba.
Entretanto, la Fuerza Aérea de la nación invadida por Moscú informó que, durante la nueva ofensiva del Kremlin contra la urbe, derribó seis misiles de crucero rusos Kalibr, seis misiles balísticos hipersónicos Kinzhal y dos drones de reconocimiento.
Según el Ejército ucraniano, los ataques fueron lanzados desde el Mar Negro con dirección al norte de Ucrania, donde se encuentra Kiev.
Pese a las explosiones, los líderes africanos, que visitaron Bucha –ciudad a las afueras de Kiev que sufrió masivas masacres de las tropas rusas– ratificaron su reunión en la capital con el presidente Volodímir Zelenski .
También está previsto que la misión africana se dirija el sábado 17 de junio a Rusia, donde sostendrá un encuentro con el mandatario ruso Vladimir Putin.
Eventual tregua y garantías en acuerdo de granos, los retos de la misión africana
Los funcionarios que ayudaron a sentar las bases para las conversaciones de la delegación africana señalaron que los líderes del continente no solo tienen como objetivo impulsar un eventual proceso de paz, sino también evaluar cómo se puede pagar a Rusia, que está bajo fuertes sanciones internacionales, por las exportaciones de fertilizantes que África necesita desesperadamente.
También están listos para discutir el tema relacionado con asegurar más exportaciones de granos ucranianos en medio de la guerra y la posibilidad de más intercambios de prisioneros entre los dos países en conflicto.
“La vida es universal y debemos proteger vidas, vidas ucranianas, vidas rusas, vidas globales (…) La inestabilidad en cualquier parte es inestabilidad en todas partes”, remarcó el presidente de Zambia, Hakainde Hichilema, miembro de la misión.
La delegación de paz también incluye a los líderes de Sudáfrica, Senegal, las Comoras y Egipto.
La propuesta de paz enfrenta grandes desafíos. El jueves 15 de junio, el vocero del Kremlin Dmitry Peskov sugirió que el acuerdo en esa materia, logrado con la mediación de Naciones Unidas y Turquía, podría no renovarse.
Según Peskov, debido a incumplimientos para llevar los productos agrícolas rusos a los mercados internacionales. Y es que ante las fuertes sanciones económicas de Occidente contra Moscú, por ordenar la invasión de su vecino país, el sistema de pagos plantea barreras, señala el Gobierno de Putin.
Además, la propuesta de paz africana se produce en momentos en que Ucrania lanza la primera fase de su tan anunciada contraofensiva para recuperar territorios arrebatados por las tropas invasoras.
Moscú afirma que infligió “significativas pérdidas” a Kiev; Ucrania señala avances
El Ministerio de Defensa ruso aseguró este viernes que sus militares en territorio ucraniano han repelido intensos combates de contraataque del Ejército de Volodímir Zelenski, en las últimas 24 horas y en diferentes líneas del frente de batalla de Donetsk, en el este de Ucrania.
Moscú asegura que unos 500 soldados ucranianos murieron en la respuesta rusa con ataques aéreos y fuego de artillería.
Asimismo, habrían destruido cinco tanques, “muchos” vehículos y otros equipos militares del Ejército ucraniano.
Sin embargo, esta información no ha sido confirmada por Kiev ni de forma independiente.
Las declaraciones rusas llegan en momentos en que las fuerzas del país atacado reportan avances y ganancias territoriales en las que, aseguran, han hecho retroceder a los invasores.
Ucrania sostiene que sus soldados han recuperado al menos siete aldeas y 100 kilómetros cuadrados en la primera etapa de su contraofensiva, que inició hace menos de dos semanas, y apuesta por un mayor impulso en los próximos días.
Reuters/ AP/

 