Yaxmin González Jiménez
ACARIGUA.- En opinión del dirigente social, Mahycol Linárez, la buena prestación de los servicios públicos es esencial para el desenvolvimiento y desarrollo de la sociedad, sin embargo, en el caso de la ciudad de Acarigua, la población se ha convertido en una víctima por las cotidianas fallas de los mismos.
En ese sentido manifestó que a pesar de estar dentro de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales y como derechos humanos, y aunque es obligación del Estado venezolano garantizarlos, la mala prestación de estos servicios es una constante. “En el caso específico de la energía eléctrica, su prestación es responsabilidad directa de Corpoelec y del gobierno, tanto nacional, como regional y municipal al ser un solo gobierno”, dijo.
-Existen comunidades en nuestra ciudad que padecen de hasta 6 horas diarias, sin que haya programación alguna en los cortes de electricidad, En algunas zonas ocurren interrupciones más frecuentes, porque el servicio es quitado durante el día en más de una ocasión, pudiendo ser en la mañana, tarde o noche, tal como sucedió el día martes 09 de agosto; cuando la electricidad fue quitada durante gran parte de la mañana y tarde, afectando las actividades regulares y comerciales en el centro de la ciudad y comunidades cercanas, señaló.
Linárez exhortó a las autoridades y entes competentes a tener una mayor responsabilidad en el ejercicio de sus funciones, toda vez que “la electricidad es de suma importancia para el día a día de las personas en pleno siglo XXI y la falta de prestación de un servicio público es demostración palpable de incapacidad gubernamental”.
Asimismo hizo un llamado a los dirigentes de las comunidades organizadas a realizar las gestiones necesarias “para visibilizar la realidad propia que afecta de forma diferente a cada comunidad, por el deterioro del sistema eléctrico y a falta de respuesta y responsabilidad inherente a Corpoelec y el Gobierno regional”.
Como venezolanos –sostuvo- tenemos el derecho a exigir se cumplan nuestros derechos, y es obligación del Estado garantizarlos, debemos ejercer nuestras potestades civiles ante esta situación que cada vez parece más normal y que no podemos normalizar, los servicios públicos son derechos humanos y la electricidad es uno de ellos.

