Como piedra en el zapato es la incomodidad que le ocasiona la candidatura de María Corina Machado, lo que ha convertido al gobierno en torpe y predecible. Es algo que en política es terriblemente malo para ellos y afortunadamente muy bueno para quienes les adversamos.
Llegar a tener la ilusa esperanza de que se iba a lograr la habilitación de María Corina Machado en esta instancia secuestrada por el régimen llamado Tribunal Supremo de Justicia, nos convertiría en seres tan estúpidos como los que hoy gobiernan. Para nosotros eso fue un golpe telegrafiado al vacío que los desgasta y los trasnocha.
El destino de Maduro y su conciliabulo está marcado dentro de la ruta electoral y de esa no se escapa. Es que hasta en ese eslogan de «furia bolivariana» que están utilizando, reflejan como la impotencia y el temor se les ha convertido en rabia al no poder frenar el descalabro del fracasado proyecto socialista, hambreador y corrupto que representan.
Es una realidad irreversible que más del 80% de los venezolanos queremos un cambio político en el país y es precisamente ahí dónde debemos mantenernos firmes en nuestra convicción de luchar. No es tiempo de titubeos, es momento de seguir nuestro decidido empeño, de conquistar la libertad y la democracia.
Maduro buscará mantenerse en el poder mediante vías fraudulentas porque pueblo no le queda, pondrá en acción toda su maquinaria represiva, apelará a la violencia para sembrar miedo, intentará escapar de las elecciones, inventará teorías conspirativas para justificar lo injustificable, pero el imperio del mal jamás vencerá sobre la justicia, la razón y la determinación. La brutalidad se combate con sabiduría. Claudicar no está en los planes de los que hemos decidido luchar por Venezuela HASTA EL FINAL.
Sigamos adelante que el futuro para Venezuela es generosamente prometedor.
Por Froilán Sánchez
