KADUNA, Nigeria.- Hombres armados secuestraron este jueves 7 de marzo a más de un centenar de alumnos de una escuela en el norte de Nigeria, denunciaron vecinos y padres de los niños. Fuentes de la Policía dijeron a EFE que, por ahora, se ha reportado la desaparición de al menos 150 estudiantes en una localidad del estado de Kaduna, en el centro-norte de Nigeria, en lo que sería el mayor secuestro en una escuela desde 2021.
«No sabemos qué hacer, todos estamos esperando ver qué puede hacer Dios. Son los únicos hijos que tengo«, dijo Fátima Usman.
«Los bandidos atacaron la escuela y se llevaron a 150 alumnos. Entraron a tiros en la escuela antes de llevarse a los alumnos al bosque», declaró, por su parte, a EFE una fuente policial, bajo condición de anonimato, sin atribuir la autoría a ningún grupo armado en particular.
La fuente se refirió así a la denuncia de padres de decenas de alumnos de una escuela en el norte de Nigeria que fueron secuestrados por hombres armados este jueves 7 de marzo.
El portavoz de la Policía de Kaduna, Mansur Hassan, confirmó el ataque, pero no dio detalles. «Nuestros hombres siguen el rastro de los delincuentes para atraparlos y rescatar a las víctimas», indicó.
Jubrilla Isah, residente local, confirmó el caso, aunque rebajó el número de secuestrados.
«Los bandidos, unos cien, atacaron la escuela primaria de la Autoridad Educativa Local en Kuriga esta mañana y secuestraron a más de 100 alumnos», dijo Isah.
«Dispararon esporádicamente durante el ataque alrededor de las 8 de la mañana (07:00 GMT) antes de llevarse a los alumnos. Algunos profesores también fueron secuestrados», añadió.
«Hay miedo en todas partes. La gente abandona Kuriga en masa por miedo a nuevos ataques. Los bandidos no se han puesto en contacto con nadie para pedir un rescate», añadió.
Medios locales, citando también a residentes como fuente, situaron el número de secuestrados en más de doscientos.
«Hacemos un llamado a las autoridades nigerianas para que rescaten de manera segura a los estudiantes y hagan que los presuntos perpetradores rindan cuentas», exigió la sección nigeriana de Amnistía Internacional en un mensaje en su cuenta de la red social X.
Schools should be places of safety, and no child should have to choose between their education and their life.
The Nigerian authorities must take measures immediately to prevent attacks on schools, to protect children’s lives and their right to education.— Amnesty International Nigeria (@AmnestyNigeria) March 7, 2024
«Las escuelas deberían ser lugares seguros y ningún niño debería tener que elegir entre su educación y su vida. Las autoridades nigerianas deben tomar medidas inmediatamente para impedir ataques a escuelas y proteger las vidas de los niños y su derecho a la educación», añadió la ONG.
El activista de Derechos Humanos y exlegislador Shehu Sani, que representó en el pasado al estado de Kaduna en el Senado (Cámara Alta) de Nigeria, afirmó que es un hecho «trágico».
«Es la misma aldea donde el director de la escuela Idris Sufyan fue asesinado y su esposa secuestrada hace más de un mes. Sin embargo, soy optimista de que su libertad estará asegurada».
It’s tragic to hear that 232 students have just been kidnapped in Kuriga village,Chikun Lg in Kaduna State.Its the same village where a school principal,Idris Sufyan was killed and his wife kidnapped over a month ago.However,I’m optimistic their freedom will be secured.— Senator Shehu Sani (@ShehuSani) March 7, 2024
Estados de Nigeria -sobre todo del centro y noroeste del país- sufren ataques incesantes por parte de «bandidos», término usado en el país para nombrar a las bandas criminales que cometen asaltos y secuestros masivos para pedir rescates.
El último secuestro masivo que involucró a escolares fue en junio de 2021, cuando hombres armados se llevaron a más de 80 estudiantes en una incursión en una escuela en el estado noroccidental de Kebbi.
Denuncia de secuestro de 45 mujeres
El caso de la escuela tiene lugar un día después de que se denunciara que al menos 45 mujeres fueron secuestradas el 1 de marzo por el grupo yihadista Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP, en inglés), en el noreste de Nigeria.
«Las mujeres habían abandonado el campamento de desplazados internos en Ngala para ir a buscar leña cuando fueron detenidas en el monte y acorraladas por terroristas del ISWAP, que se llevaron a la mayoría de ellas», declaró a EFE por teléfono Muhammad Goni, líder de las Fuerzas de Trabajo Conjuntas Civiles (CJTF, siglas en inglés).
Las CJTF son grupos armados de autodefensa civil que ayudan a las Fuerzas Armadas nigerianas en la lucha contra el yihadismo.
«Según nuestros hombres en Ngala, unas 45 de las mujeres, de las 60 que fueron inicialmente retenidas, fueron secuestradas por los terroristas», explicó Goni, al precisar que «algunas escaparon y están de regreso en el campo de desplazados internos».
«Desde entonces hemos estado trabajando con los militares para rescatar a las mujeres secuestradas y tratar con los secuestradores», agregó el líder de las CJTF.
El noreste de Nigeria es blanco de ataques del grupo yihadista Boko Haram desde 2009, una violencia que se agudizó a partir de 2016 con la aparición de su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP).
Ambos grupos buscan imponer un Estado de corte islámico en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiano en el sur.
EFE/ Reuters/