Yaxmin González Jiménez
ACARIGUA.- Ante lo que consideran un atropello más contra los venezolanos de la tercera edad, el Comité de Derechos Humanos para la Defensa de Pensionados, Jubilados, Adultos Mayores y Personas con Discapacidad viene procesando la denuncia de un sinnúmero de ciudadanos a quienes no les fue depositada la asignación de la pensión correspondiente al pasado mes de agosto ni el llamado bono de guerra económica, tras haber sido excluidos de este beneficio por fallecimiento o por suspensión en el pago.
«No sabemos cómo una persona viva aparece como fallecida sin que exista un acta de defunción y para poder aclarar esta situación se le está pidiendo una cantidad absurda de requisitos que le resultan muy costosos para un pensionado venezolano como sacar copia de la cédula de identidad, pedir una fe de vida, solicitar al CNE una constancia como elector y del centro donde vota, una copia de la cuenta individual del IVSS, una carta explicativa del caso en particular, dos planillas de la 14-213 del Seguro Social, así como una impresión del pago en línea de la pensión, lo que representa un gasto de unos 40 dólares en dichos trámites», explicó al respecto, Edgar Silva, coordinador del referido comité.
Comentó que la eliminación de beneficiarios con pensiones de Amor Mayor o del IVSS se viene registrando en diversos estados del país, según las denuncias que han formulado los afectados.
En ese sentido indicó que no se trata simplemente de reclamar la pensión mensual de 3,5 dólares, cuyo monto considera irrisorio, sino hacer valer el derecho que le corresponde a quienes cotizaron debidamente al IVSS y salieron pensionados por los canales regulares, así como de las asignaciones por Amor Mayor, que a pesar de no haber cotizado completo, tambien les toca ese derecho consagrado dentro de la Constitución de Venezuela.
Frente a este panorama, el vocero de los pensionados y jubilados reiteró que este sector de la población venezolana se mantiene en una situación precaria, la cual insistió en calificar como «un exterminio» por la privación de alimentos y medicinas, precisamente por un ingreso pírrico que no les permite suplir las necesidades básicas.
-No existe en estos momentos un plan de pensiones en Venezuela porque ese sistema, que fue pagado con años de trabajo, no le sirve al ciudadano para el retiro ni para vivir con dignidad y bienestar en su vejez porque no puede gozar de alimentos, medicinas o recreación, tomando en cuenta que el costo de la canasta alimentaria superó los 540 dólares y esos 3,5 dólares de pensión no significan nada, dijo.
Silva manifestó que la emergencia humanitaria compleja que vive el país ha sido devastadora para los adultos mayores y más aún cuando, aparte de los bajos ingresos, también enfrenta la soledad que ha causado la migración masiva.
