CARACAS. Este lunes, el Fiscal General de la República, Tarek William Saab ofreció declaraciones para contrarrestar las “brutales y mercenarias campañas de descrédito» en contra de la democracia, de la paz, de mantener un estado de convivencia entre los venezolanos y en pro de la familia venezolana.
En declaraciones desde el Ministerio Público, Saab dijo que “he observado con suma evaluación crítica la manera como, particularmente en las últimas semanas, y días, ha arreciado una campaña para mostrar, a nivel mundial, a los que fomentaron actos terroristas y criminales los días 28, 29 y 30 de julio”.
“Estas personas no son presos políticos. Son criminales que se prestaron para acciones terroristas y delictivas pagadas a través de los mal llamados ‘Comanditos’ y pretenden desencadenar una guerra civil en Venezuela”, aseguró.
Estableció que «estos sujetos usaron como excusa el descontento contra los resultados electorales y “dejaron un saldo de 25 muertos”, por lo que, consideró que “es totalmente antipático que se quiera presentar que estos casos tuvieran carácter político”.
Asimismo, el fiscal aseveró que en el país “no hay niños detenidos, hay, lamentablemente, adolescentes de 16 y 17 años que han confesado que fueron utilizados para ocasionar estos actos de violencia”
Destacó que la Fiscalía tiene aproximadamente 300 documentos que revelan la acción violenta de los llamados «comanditos».
A la vez, Saab indicó que, hasta el momento, “no ha habido una sola denuncia de ningún familiar de alguna de estas víctimas que vincule el hecho a alguna fuerza policial o algún agente del venezolano. Lo que quiere decir que fueron grupos civiles violentos pagados para generar embriones de guerra en todo el país”.
El fiscal enfatizó que tanto los detenidos como sus familiares han sido atendidos por el Ministerio Público, además, los detenidos ha recibido atención médica y se le ha otorgado revisiones de medidas por condiciones de salud.
Igualmente, explicó que se han ocupado de requerimientos y comunicaciones que han presentado los familiares, otorgándoles reconocimientos médicos de rigor. /Globovisión