BUENOS AIRES.- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, indicó este lunes que los problemas que tiene Venezuela se solucionan con diálogo y no con la imposición de bloqueos contra el país.
«El problema de Venezuela se solucionará con diálogo, no con bloqueos», expresó Lula en rueda de prensa ofrecida en Buenos Aires, junto a su par de Argentina, Alberto Fernández.
El mandatario brasileño dijo que su postura sobre Venezuela no es de crítica sino de conciliación y restablecimiento de las relaciones que rompió su antecesor, el ultraderechista Jair Bolsonaro. «Yo, en vez de criticar, prefiero dar un consejo», dijo.
Lula adelantó que junto al Gobierno de Venezuela, que preside Nicolás Maduro, trabajarán por «restablecer la relación civilizada entre dos estados autónomos, libres e independientes»; y en ese sentido, comentó que su administración quiere que Venezuela tenga embajada en Brasil.
El presidente brasileño agregó que como Presidente quiere ser «un constructor de paz» y poner en práctica lo que ha aprendido a lo largo de su vida, que cuando más se dialoga entre partes que discuten, más oportunidades hay para llegar a un acuerdo.
«¿Quién está equivocado?»
El presidente de Brasil instó a la comunidad internacional y a la prensa ha reflexionar sobre lo que realmente sucede en el conflicto político venezolano y ver qué sector es el que está realmente equivocado.
«Veo que muchas personas le piden comprensión a Maduro y esas personas se olvidan que (desde la oposición y la comunidad internacional) se hicieron cosas abominables contra la democracia, como reconocer a un tipo que no era presidente, que nunca fue electo como presidente de la República, que fue Guaidó, un sujeto que estuvo por varios meses ejerciendo el papel de presidente sin ser presidente», comentó Lula.
El líder brasileño agregó que a partir del falso gobierno de Guaidó, se llegó incluso al punto de secuestrar las reservas de oro de Venezuela depositadas en el Banco de Inglaterra, y la justicia del Reino Unido decidió entregarle al falso «presidente», las garantías sobre ese dinero. «Entonces me pregunto ¿Quién está equivocado?», cuestionó Lula.
Sostuvo que en el caso venezolano se debe reflexionar, «tranquilamente», sobre el respeto a la autodeterminación de los pueblos, y observar las «muchas injerencias» que se han dado en el proceso internacional contra Venezuela.
Lula también dijo que en su momento la región logró que Venezuela fuese tratada y respetada con dignidad y que eso se logrará una vez más.
«Ya lo logramos una vez y lo vamos a lograr nuevamente. Venezuela será tratada nuevamente como todos los países deben ser tratados, lo que quiero para Brasil también lo quiero para Venezuela, respeto a mi soberanía y respeto a la autodeterminación de los pueblos», concluyó Lula.
«Favorecer el diálogo entre venezolanos»
Por su parte, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, manifestó que la única preocupación que debe tener la comunidad internacional sobre la situación política en Venezuela es la de «favorecer el diálogo entre los venezolanos, que los venezolanos recuperen la convivencia democrática y que sus derechos sean respetados».
Fernández recordó que su país, desde que él llegó a la Presidencia, ha sido parte del Grupo de Contacto con Venezuela, que ha procurado trabajar por el avance de conversaciones entre las partes y que se logren acuerdos a través de un diálogo que calificó como «bastante fructífero».
En ese sentido, puso como ejemplo la reunión que realizaron en noviembre pasado la oposición y el gobierno venezolano en París, que contó con su presencia y la de los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y de Francia, Emmanuel Macron.
El mandatario también respondió a la prensa a la interrogante si el presidente Maduro y el de Cuba, Miguel Díaz-Canel, asistirán a la Cumbre de la la VII Cumbre Presidencial de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que se realizará en Buenos Aires desde este martes 24 de enero.
«No tengo ninguna información de que el presidente Maduro no venga, pero no sé qué hará», comentó Fernández, quien recordó que a este foro regional «todos los países están invitados».
«La inquietud por la presencia del presidente de Cuba y de Venezuela está más en algunos medios que en los miembros de la Celac», agregó el presidente argentino, quien recordó que su país no pasará lo que sucedió en EEUU, con la Cumbre de las Américas realizada en Los Ángeles el año pasado, cuando sus organizadores decidieron excluir unilateralmente a Caracas y La Habana.
Moneda común en la región
Uno de los grandes asuntos que los mandatarios buscan avanzar durante la cumbre en Buenos Aires es el desarrollo de una moneda común, de nombre sugerido ‘Sur’.
“Pretendemos superar las barreras a nuestros intercambios, simplificar y modernizar las reglas e incentivar el uso de monedas locales” destacaron Da Silva y Fernández en una declaración conjunta.
Argentina es el mayor socio comercial de Brasil en la región y ambos presidentes subrayan que la unificación de una moneda entre sus dos países sería la base para una eventual extensión de la misma a más naciones latinoamericanas.
“También decidimos avanzar en las discusiones sobre una moneda sudamericana común que pueda usarse tanto para flujos financieros como comerciales, reduciendo los costos de las operaciones y nuestra vulnerabilidad externa», indicaron ambos presidentes en una declaración escrita.
Si bien esta iniciativa ya fue discutida en 2019, su impulso resulta novedoso tras el rechazo del Banco Central de Brasil en ese momento.
‘Lula’, imán de una nueva integración latinoamericana
‘Lula’ vuelve al bloque de la izquierda latinoamericana con un impulso por resarcir el distanciamiento de su antecesor, mientras Fernández defiende la participación de los cuestionados líderes de Venezuela y Cuba por la situación de derechos humanos en sus territorios.
No obstante, la prensa argentina reportó que el mandatario venezolano Nicolás Maduro decidió a último minuto no participar en el encuentro al citar motivos de seguridad. En su lugar enviará a su canciller.
La integración entre las naciones latinoamericanas resulta prioritaria, pero también el equilibrio ante Estados Unidos y China. Un enorme desafío frente a las dos potencias, que disputan la influencia mundial.
La delegación del Gobierno de Joe Biden, que encabeza el senador Chris Dodd, destaca la necesidad de “mirar con mayor sensibilidad lo que pasa en Sudamérica”.
Por su parte, China, un socio desde los inicios de la organización fundada por el fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, indica que existe mayor cercanía con el gigante asiático.
Los expertos resaltan que con ‘Lula’ y el Gobierno argentino a la cabeza de la cumbre ambos buscan situarse como interlocutores de peso frente a los planteamientos de Washington y en línea con el acercamiento de varios países latinoamericanos a Beijing.
Reuters/ AP/ EFE/ globovision.com/
