¿Y la oposición que se oponga?

Los educadores han realizado un esfuerzo loable exponiendo sus empleos y hasta sus vidas, no olvidemos todas las técnicas “persuasivas” existentes en Venezuela para disolver las protestas. Aun así, no han contado con el apoyo masivo de la sociedad, pocos gremios se han sumado, los abuelos son uno de ellos porque pertenecen a la lista de sectores nacionales más afectados por otro tóxico socialismo.
Cuando parece (¿o parecía?) un momento ideal para la lucha, más allá de un justo salario, sino extrapolar esos ingentes esfuerzos y sacrificios al rescate de nuestra libertad, la total desconexión entre integrantes de una misma sociedad dedicada a sobrevivir ha hecho más bien que el régimen aumente mucho más su flexibilidad, hasta haya sancionado una ley cuya interpretación no tiene límites, en la que bachilleres pueden ser planificadores, ejecutores y profesores en la educación básica, sustituyendo a maestros profesionales… es una advertencia.
Por otro lado, los políticos hacen gala de su especial condición, ser lo peores de toda nuestra historia, lo que envuelve a los del chavismo y la oposición. Quienes se deben oponer andan gritando por el mundo que nuestro país existe una cruenta dictadura, pero al mismo tiempo solicitan a sus instituciones apoyo para sus primarias y deciden medirse en otra elección 100% controlada por “la dictadura” ¿Quién los va a tomar en serio?
Esa falta de un liderazgo confiable el motivo de la inacción. En 3 oportunidades, 2002, 2014 y 2017, los venezolanos hicimos lo que hoy hacen los educadores, pero en mucho mayor escala, lamentablemente, fuimos traicionados por la “oposición” a través de diálogos perversos donde solo negociaban a beneplácito de los asistentes y pactos que nos llevaban al suicidio de las elecciones absurdas, todo por cuotas de poder, dádivas y los recursos de campaña. Por tal motivo, el venezolano hoy es reacio a exponer su vida, no existe un liderazgo coherente, al menos no en posición vanguardista.
Sentimos pena ajena cuando algunos profesionales del periodismo se comunican con nosotros e infieren que si las cosas son como enunciamos en nuestros escritos ¿Por qué la oposición usa las instituciones públicas psuvizadas para escoger candidatos o por qué acceden participar en elecciones sin ningún vestigio de legalidad ni legitimidad? Lamentablemente, la respuesta es solo una: no ha habido oposición real en estos luengos 24 años de oscurantismo.
Mismas acciones, mismos lúgubres resultados… entonces ¿Qué hacer? Lo primero es identificar a los políticos cuyos pronunciamientos distan del de los demás, sobre todo, los que marcan distancia de la agenda del régimen y hacen señalamientos a las necesidades sentidas del país.
Otro factor importante. Debemos esclarecer la necesidad imperante de salir del espejismo democrático/electoral, 24 años en una componenda que solo busca satisfacer las demandas del régimen y sus cómplices, haciendo creer “necesitamos candidatos”, lo que favorece a los partidos grandes con maquinarias y fuerza de imposición, muy tristemente, son quienes han pactado con el castrismo venezolano además de algunos chicos y otros “partidos” nuevos. Por tal motivo, es que el régimen más rechazado de nuestra historia se desvive por lo electoral, rumbo a la elección 30 en desde 1999, sin que pierda ni cuando pierde
Venezuela necesita un liderazgo que se oponga, que diga no a tétricos diálogos secretos y distantes, a elecciones con instituciones psuvizadas, que no ceda en la presión social. Todo aquel que se presta para la trillada agenda de los últimos 24 años es, sin lugar a duda, aliado del chavismo.

LEANDRO RODRÍGUEZ LINÁREZ

@leandrotango

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