MADRID.- El Real Madrid (2º) evitó la derrota en la recta final y terminó empatando 1-1 ante un Atlético de Madrid (4º) en inferioridad numérica, este sábado en la 23ª jornada de la Liga española, donde el camino parece allanarse todavía más para el líder FC Barcelona.
El uruguayo José Giménez hizo soñar con la victoria al Atlético al marcar en el 78, rematando perfectamente de cabeza una falta colgada desde el lateral por el francés Antoine Griezmann. El Real Madrid puso el 1-1 definitivo en el 85 también con un tanto de cabeza de otro jugador uruguayo, en su caso del joven de 18 años Álvaro Rodríguez en un saque de esquina lanzado por Luka Modric.
Álvaro Rodríguez es una de las grandes promesas del equipo merengue. Este mes había destacado ya brindado una asistencia de gol a Marco Asensio en una victoria liguera ante el Osasuna.
«Es un chico que trabaja muy bien en los entrenamientos. Es muy alto, tiene ese gol. Con el Osasuna entró muy bien, con una asistencia, y hoy con el gol salvó un punto. Es muy importante, ojalá que siga así», dijo a DAZN el arquero belga Thibaut Courtois sobre su joven compañero.
Pese a no ganar, el resultado del Atlético es especialmente meritorio ya que jugó con un hombre menos la última media hora de partido por la roja al argentino Ángel Correa en el 63, al considerar el árbitro que había agredido de un codazo al alemán Antonio Rüdiger.
Giménez, el goleador del Atlético en esta ocasión, había comenzado como suplente y entró en el partido en el minuto 23, sustituyendo al lesionado Reinildo. Su gol rompió una racha de 465 minutos sin que Courtois fuera batido en la Liga.
En la clasificación, el Real Madrid reduce provisionalmente de ocho a siete puntos su desventaja respecto al líder Barcelona, que puede ampliar su margen a diez unidades si gana el domingo en el terreno del modesto Almería (18º).
Todo ello justo antes de que el jueves Real Madrid y Barcelona midan sus fuerzas en un Clásico en la ida de las semifinales de la Copa del Rey.
El empate en el derbi frena la euforia en el Real Madrid, que venía de conquistar el Mundial de Clubes y de encadenar después dos triunfos ligueros (Osasuna y Elche), antes de su gran victoria del martes por 5 a 2 en el terreno del Liverpool, en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones.
«No es un adiós a la Liga. Es aún más complicado, pero vamos a pelear hasta el final», prometió el técnico italiano del Real Madrid, Carlo Ancelotti.
Simeone, para la historia
Por su parte, el Atlético sigue cuarto, dentro de la zona de Liga de Campeones, pero ve reducida a dos puntos su ventaja sobre el quinto, el Betis, que el viernes venció 3-2 en el campo del colista Elche.
Más allá del resultado, el entrenador del Atlético, Diego Simeone, vivió un día especial por dos datos históricos.
Con 425 partidos se convirtió en el entrenador que ha dirigido más partidos a un mismo club en la historia de la Liga española, superando los 424 que Miguel Muñoz entrenó al Real Madrid. Además, Simeone igualó a Luis Aragonés como el entrenador que más partidos oficiales ha dirigido al Atlético en su historia, con 612.
«Estuvimos cerca de ganar el partido. Pero bueno, esto ocurre contra los grandes equipos», señaló Simeone.
En el resto de partidos del sábado, el Rayo Vallecano (6º), en puestos europeos, se vio sorprendido y perdió 1-0 en el terreno del Cádiz (14º), que se aleja del descenso gracias a un tanto de Sergio Guardiola en el 74.
El Espanyol (12º) se asentó en la zona tranquila con una victoria 2-1 ante el Mallorca (8º), con un doblete del danés Martin Braithwaite.
Este sábado se disputa otro partido, entre un Valencia (19º) con todas las alarmas disparadas y la Real Sociedad (3ª).
AFP/
