La tarde del martes de las fiestas carnestolendas, esas de quien la vive es quien la goza, le puso un broche negro al largo derroche de dólares promovido por Primitivo Cedeño, dicen que casi 600 mil verdes, con un volcamiento de un camión 350, cuyo conductor al parecer no estaba sobrio y que los numerosos agentes de seguridad que había en la zona, le permitieron una sobrecarga de personas. Al salírsele una rueda, el vehículo volcó al final de la Avenida Libertador de Acarigua, causando cinco muertos y numerosos heridos.
En las tarimas, el gobernador gozón y cirquero, pero altamente ineficaz e incompetente para el cargo que ostenta, gritaba para preguntar exaltado que, si querían fiestas y por supuesto, a quien no. Hasta yo, cuando traiga a Silvestre Dangond, me voy a aparecer, aunque sea de lejitos, porque coincido con el aguablanqueño, en el gusto por esa sabrosa canción de “yo sigo siendo el papá”. “Es que andan unos amargados por ahí criticando los carnavales”, berreaba el individuo. A muchos nos gustan los espectáculos, pero esta procaz copia vulgar del circo romano, intenta marear a una población que padece hambre crónica, que recibe limosna salarial y pensiones inhumanas, con una educación en el suelo y de los hospitales, CDI y ambulatorios, mejor ni hablar.
La lengua es castigo del cuerpo. La sangre de inocentes le pajeó el alboroto. Tuvo que salir a decir que no jugaran con el dolor de los familiares de las víctimas, ni se usara con fines políticos. Hay que ser bien zamuro para lamerse las heridas con eso. O “brujérico del mal” para ofrendar sacrificios humanos. Los cuerpos de seguridad no encontraban como trasladar a los heridos al Hospital. Una niña fue transportada en la parte de atrás de una camioneta, porque no había una ambulancia a pesar del gentío. Las que compraron están guardadas en un galpón al frente de la conocida chicharronera de Araure, y dos están en los peajes de Los Hijitos y La Lucía. Daba tristeza ver a los bomberos, mandando audios y videos, desesperados pidiendo auxilio a las clínicas para que ayudaran porque en el Casal Ramos no había nada. Dicho por ellos mismos.
Mientras ese drama se desarrollaba sin respuesta en Acarigua y Araure, el video de la pareja imperial se regaba por las redes sociales, bailando al son de Jorge Celedón, que se llevó una buena tajada de los dólares que, sin saber el origen, fueron donados por los “amigos” de Tivo para el Mascarada 2023. Y llega entonces el miércoles de ceniza, en lugar de anunciar una modesta dotación de insumos para los centros de salud, se arman de cinismo para anunciar la programación para la Semana Mayor. Y en materia de asistencia, se llevaron el premio mayor de la adulación, los colegas asalariados de la Gobernación. Según el último censo, en Portuguesa somos un millón de habitantes. Unos 200 mil han emigrado a otros países y a otros estados de la República. Es decir, que hasta la gente de El Toro el último rincón del municipio Santa Rosalía hasta El Regalo, límite con Lara en el municipio Unda, bajaron a las calles de las cuatro ciudades, a ver a los artistas invitados. Verdad que esos mojones propagandísticos no se los creen ni ellos mismos.
Y eso es lo noticioso, porque todos los días suceden hechos que ameritan de una ambulancia, un médico o una gasa. Les conté que el día de la memoria y cuenta, trasladaron en una camilla, en más de un kilómetro a un enfermo al Hospital de Guanare y el sábado, a las 8 pm en Papelón, dos motorizados en un choque, fueron trasladados heridos al CDI y al ambulatorio, pero no fueron atendidos porque no había insumos. Uno necesitaba ser trasladado a Guanare, pero hubo que hacerlo en una camioneta. Y Cedeño, Ippolito y Alirio que vendió unos carros operativos como chatarra, gozando lo que están viviendo.
Ay, Primitivo. Como cavas tu propia tumba política. A ustedes no les importa el dolor de la gente ni sus angustias ni necesidades. Ya llevas un año brincando y saltando, pero el fracaso es descomunal.
IVÁN COLMENARES
