MADRID.- La disociación es un recurso de adaptación de nuestro cerebro a modo de defensa, que puede convertirse en un arma de doble filo. Sabemos que afrontar una situación traumática no es nada fácil y el cerebro tiene las herramientas necesarias para superar ese bache, aunque después traiga consecuencias negativas. La disociación puede afectar a la memoria y a la percepción del presente en las personas que lo sufren.
Puede presentarse en un momento puntual, cosa que entra dentro de la normalidad o ser un trastorno emocional que requiere de un tratamiento especializado.En este post nos vamos a dedicar a explicarte detalladamente qué es la disociación y cuáles son los comportamientos que manifiesta una persona que tiene este trastorno.
Pero es importante saber que la única manera de poder deshacerte de la disociación de tu mente y sanar los traumas que guardas en tu corazón es pidiendo ayuda profesional de psicólogos y profesionales de la salud mental.
Qué es
La disociación es un mecanismo de adaptación de nuestro cerebro que hace que nuestra mente se desconecte cuando nos encontramos en una situación límite que sobrepasa los recursos psicológicos que tenemos para afrontarla. Se trata de una distancia de seguridad que adquiere nuestra mente con la realidad, a fin de reducir el impacto emocional, el miedo, la tensión o el dolor del momento.
Este mecanismo se activa de forma instintiva cuando nuestro cerebro, de forma inconsciente, acepta que no hay salida al problema.
Es muy común que lo sufran pacientes que han sufrido violaciones, abuso infantil o bullying, ya que son víctimas que no han podido escapar.La disociación afecta como una anestesia para el cuerpo y para las emociones, impidiendo que el paciente se implique en lo que está pasando a su alrededor.
La razón científica de la disociación es que la amígdala (centro emocional del cerebro) activa la producción de cortisol (inhibidor del hipocampo).
El hipocampo es la estructura cerebral que nos permite dar significado a las experiencias que vivimos y ubicarlas en nuestra línea de existencia.
Además, también se activa la producción de opioides (anestésicos naturales).
Síntomas de la disociación
Los síntomas y signos pueden ayudarte a identificar una afección, que es posible que no hayas reconocido en el pasado.
Estos son los síntomas de la disociación que pueden sufrir los pacientes: Problemas de salud mental, como depresión, ansiedad, pensamientos suicidas, etc.
Perder la memoria de ciertos períodos, etapas, sucesos o personas que estuvieron presentes en los actos dolorosos.Incapacidad de afrontar bien las emociones fuertes que llegan a tu vida.Impresión de estar separado de ti mismo y de tus emociones.
Problemas en ciertas áreas de tu vida, como las relaciones personales, el trabajo u otras áreas cotidianas.
Sensación de que las personas o cosas que te rodean están distorsionadas o son irreales.
Se confunde la identidad de las víctimas.Si estás sufriendo alguno de estos síntomas, debes ser consciente de que necesitas ayuda de un profesional de la salud mental para recuperar la estabilidad.
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