Miguel Enrique Villavicencio.- Autoridades civiles y militares conmemoraron en Guanare los 240 años del natalicio del Libertador Simón Bolívar, el Bicentenario de la Batalla Naval del Lago y Día de la Armada Nacional
El acto fue encabezado por la doctora Amarilys Pérez, secretaria general del Gobierno regional, el general de división José Gregorio Escalona Briceño, Comandante de la Zona Operativa de Defensa Integral N°33 en el estado Portuguesa, y el alcalde de Guanare, Óscar Novoa.
Además tuvo como orador de orden al general de brigada Ramón Alexander Castro Pereira, jefe del Comando de Zona № 31 de la Guardia Nacional Bolivariana.
Autoridades civiles y militares presentes
Después de las ofrendas ante el Padre de la Patria, el general Castro Pereira intervino, haciendo un recorrido por la vida del Libertador Simón Bolívar.
-Hoy más que nunca tenemos que continuar cumpliendo el gran sueño de Bolívar que no sólo es defender la libertad e independencia que él conquistó para todos nosotros, sino también afianzar la seguridad y el progreso de todo el hemisferio; es decir, lograr la integración de las naciones – dijo.
El alcalde Óscar Novoa recibe la réplica de la espada del Libertador Simón Bolívar
Resaltó que Bolívar no sólo fue el hombre más grande de América, sino también el primer humanista, y que su legado hoy continúa vigente con el proceso revolucionario que impulsó el comandante Hugo Chávez Frías.
Ofrenda floral de la Gobernación del estado
Espada de Bolívar
Vale destacar que en este mismo acto, el alcalde Óscar Novoa recibió de manos de la doctora Amarilys Pérez la réplica de la espada del Libertador Simón Bolívar.
Allí, el burgomaestre guanareño expresó su compromiso de seguir trabajando para que Venezuela siempre sea un territorio libre e independiente.
Parada militar
De igual manera, expresó que como militante del proceso revolucionario continuará acompañando el legado de Bolívar y Chávez en la construcción de la patria.
-Aquí estamos firmes en defensa de nuestro pueblo, de nuestra gente y de nuestra patria. Leales siempre, traidores nunca – finalizó.
