Madrid.- Aunque sobre los escenarios luzca el vigor de antaño, casi como un fenómeno de la naturaleza, a Bruce Springsteen le llegan este lunes los 75 años de edad en medio de una temporada llena de baches físicos y emocionales que el autor de ‘Born to run’ esquiva como puede.
En buena medida, la muerte se ha convertido en una compañera más presente que nunca en su vida tras los fallecimientos de personas importantes de su entorno, especialmente su madre, Adele Springsteen, pero también como una sombra contra la que lucha su mujer, Patti Scialfa, miembro de The E-Street Band, afectada por un tipo de cáncer de la médula ósea.
Estos son hechos que se han conocido recientemente, pero la idea de la pérdida y el paso del tiempo le lleva rondado hace tiempo al Boss, como hizo patente en su disco ‘Letter To You’ (2020), grabado tras la muerte de George Theiss, con el que había coescrito las primeras canciones de su vida y con el que formó su primera banda, The Castiles, siendo Springsteen su último miembro superviviente.
Lejos de amedrentarle, aquello le llevó a escribir un disco que, paradójicamente, era «una celebración de la música, del rock and roll y de la experiencia de formar parte de una banda», lo que de forma coherente le llevó a buscar de nuevo la compañía de la E-Street Band seis años después de su último trabajo conjunto.
Probablemente imbuido por ese ataque de nostalgia que sobreviene a la mente humana en tiempos de zozobra, en 2022 alumbraría el que es hasta ahora su último disco, ‘Only The Strong Survive’ (Solo los fuertes sobreviven, en español), en el que versionaba canciones que cargaron de felicidad su infancia.
Cerrada por fin su residencia de conciertos en Broadway, la reunión con la E-Street Band prosperó más allá del estudio y en 2023, por primera vez desde 2017, volvió a salir también de gira con su mítica banda.
Pronto se reveló, sin embargo, que no sería una gira tranquila. Hace justo un año, en septiembre de 2023, poco después de cumplir los 74 años, se vio obligado a posponer buena parte de sus fechas en EE.UU. por una úlcera péptica que le dio problemas repetidamente.
Los problemas de salud no cesaron. Este mismo verano, a sus conciertos en el estadio Metropolitano de Madrid llegó tras varios días de reposo por prescripción médica al verse afectada su garganta.
Aquello probablemente reavivó los recuerdos de la operación a la que se sometió hace años, cuando para solventar un problema de entumecimiento en el lado izquierdo de su cuerpo, tuvieron que reemplazarle varios discos de la columna y, para ello, le inmovilizaron durante unos meses las cuerdas vocales.
Springsteen, quien ha estado muy cerca de su amigo Jon Bon Jovi en su recuperación de una cirugía precisamente para recuperar la voz, reconoció a los medios que durante esta gira llegó a temer «no volver a cantar de nuevo».
Los problemas en ese sentido se solventaron y fueron muchas las ciudades que volvieron a oírle rugir en grandes estadios. No obstante, también fue esta la gira en la que descubrieron la enfermedad de su mujer y que la obligó a participar solo de manera muy parcial en los conciertos.
Con ella precisamente grabó en 2023 la que es su última canción volcada en plataformas digitales, ‘Addicted to Romance’, como parte de la banda sonora original de la película ‘She Came To Me’.
Después de 33 años de matrimonio, forman una de las parejas más sólidas del mundo del rock. Springsteen reconocía en sus memorias ‘Born to run’ la importancia de su mujer como su sostén emocional y psicológico en las etapas en las que, como le sucediera su padre, sufre episodios depresivos.
«Huyo, disimulo, esquivo, desaparezco, regreso, raramente pido perdón, y mientras tanto Patti defiende el fuerte mientras yo intento incendiarlo», escribía Springsteen sobre unas crisis que, pese al psicoanálisis y los medicamentos, se repiten cada vez con mayor asiduidad.
Igual de importante fue su madre, cuyo fallecimiento comunicó el pasado 1 de febrero en redes sociales, después de una década afectada por el mal de Alzheimer. También ella fue el pilar más sólido de su familia, pero más aún fue la que le inculcó buena parte de sus gustos musicales y la que, pese a la precaria situación económica, le consiguió su primera guitarra.
A este respecto, recordaba Springsteen en su autobiografía que su primera banda de juventud lo echó por tener «una guitarra demasiado barata. No tuve valor para contarle a mi madre el motivo. Ella había invertido todo lo que tenía en aquella ‘basura’, y yo iba a lograr que funcionase», comentaba el Boss, que a partir de entonces se obsesionó con la práctica.
Miembro del Salón de la Fama del Rock And Roll con 22 premios Grammy y un Oscar por su tema ‘Streets of Philadelphia’, algunos de estos hechos recientes formarán parte del documental que Disney + estrenará en exclusiva el próximo 25 de octubre, ‘Bruce Springsteen and The E Street Band: Diarios de carretera’.
Además, una obra recién publicada en España recopila lo más granado de su vida hasta su conversión en leyenda, ‘Springsteen. 75 aniversario’ (Libros Cúpula), de Gillian G. Gaar. /EFE