Yaxmin González Jiménez
ACARIGUA.- A juicio del promotor de Fuerza Vecinal en Portuguesa, Robert Lucena, resulta preocupante la realidad que padecen los portugueseños al acudir a los distintos espacios de salud pública, tomando en cuenta la grave desmejora en los servicios hospitalarios en perjuicio de los sectores de escasos recursos económicos.
«En nuestros recorridos hemos observado una merma en la calidad de la prestación de todos los servicios, que van desde la inoperatividad de departamentos, falta de personal, carencia de insumos y reducción de los horarios de atención, lo cual hace que la salud en Portuguesa pase a estar en terapia intensiva, y por lo precario del servicio, su principio de gratuidad se pierde, ya que el usuario opta por recurrir a servicios privados en clínicas y laboratorios para realizar los exámenes que, en el pasado, se podían hacer en los hospitales, ambulatorios, CDI y Barrio Adentro de cada localidad, expresó.
Como parte de la crisis que afecta al sector salud, Lucena se refirió al caso del Hospital Universitario Jesús María Casal Ramos, «donde el servicio de nefrología funciona a media máquina, no hay Rayos X, la UCI solo cuenta con dos camas, el área de Neonatología se encuentra prácticamente inoperativa, el laboratorio central se encuentra abandonado, el mamografo está dañado, el banco de sangre no funciona los fines de semana, el comedor interno para alimentar a los pacientes no funciona. A esto se suma que la ausencia de personal médico, enfermería y bioanálisis hace que la atención y cuidado sea más tardía, efecto que se observa en la asignación de citas médicas y realización de las intervenciones quirúrgicas».
El representante de Fuerza Vecinal manifestó que una situación similar se repite con el resto de las instituciones públicas de salud de la región, además de la falta de ambulancias y fallas con las infraestructuras por la ausencia de planes de mantenimiento por parte del Gobierno regional y nacional.
En el caso -agregó-del Ambulatorio Adarigua, que era el único centro que realizaba los exámenes CD4, CD8 de laboratorio para pacientes VIH de Portuguesa, Yaracuy, Barinas y Cojedes, este servicio se ha vuelto muy irregular perjudicando a los enfermos. Y a esto se le suman los embates externos de las fallas de los servicios de agua y luz para la operatividad de los departamentos, y para los usuarios, el uso de baños.
En tal sentido, el dirigente político argumentó que todos estos elementos atentan contra la salud y la vida del portugueseño, violando un derecho universal consagrado en el artículo 43 de la Constitución Bolivariana de Venezuela, de allí que exhortó al gobernador del estado y al Ministerio de Salud a tomar cartas en el asunto, al tiempo que instó a la Asamblea Nacional a realizar un diagnóstico de esta situación, a fin de que se pueda mejorar el servicio a los usuarios.
