WASHINGTON.- La estrella del baloncesto profesional de Estados Unidos, Brittney Griner, regresa a casa. Así lo confirmó el Gobierno de Joe Biden este jueves 8 de diciembre.
La deportista, detenida desde el pasado febrero en Rusia, fue puesta en libertad a cambio de la liberación del traficante de armas ruso Viktor Bout, quien se encontraba en una prisión de EE. UU.
«Hace unos momentos hablé con Brittney Griner. Está a salvo. Está en un avión. Está de camino a casa (…) Detenida en circunstancias intolerables, Brittney pronto estará de vuelta a los brazos de sus seres queridos y debería haber estado así todo el tiempo. Este es un día por el que trabajamos durante mucho tiempo. Nunca dejamos de presionar por su liberación. Tomó intensas y minuciosas negociaciones», aseguró Biden.
El intercambio de los dos detenidos se llevó a cabo en Emiratos Árabes Unidos y desde allí la deportista de 32 años abordó un vuelo hacia Estados Unidos.
«Este es un día por el que hemos trabajado durante mucho tiempo. Nunca hemos dejado de presionar para conseguir su liberación. Han sido necesarias negociaciones minuciosas e intensas, y quiero dar las gracias a todos los funcionarios de mi Gobierno que han trabajado sin descanso para conseguir su liberación. También quiero dar las gracias a los Emiratos Árabes Unidos por ayudarnos a facilitar el regreso de Brittney», aseguró Cherelle, esposa de la basquetbolista.
La dos veces medallista de oro olímpica y jugadora activa de la WNBA, en el equipo Phoenix Mercury, fue detenida en un aeropuerto cerca de Moscú el 17 de febrero.
Ante un tribunal admitió que llevaba cartuchos de marihuana en su equipaje, según lo prescrito por su médico.
Y el pasado agosto fue condenada a más de nueve años de prisión bajo los cargos de posesión y contrabando de drogas.
El pasado noviembre, funcionarios rusos informaron al abogado de Griner que la joven había sido reubicada en una colonia penal, donde los turnos de trabajo forzado para los prisioneros suelen durar entre 12 y 14 horas por día, lo que suscitó mayor preocupación sobre sus condiciones.
Washington continúa negociando por la liberación de más estadounidenses
El trato para liberar a la jugadora profesional de baloncesto fue negociado durante varios meses. Desde el pasado junio, Washington aseguró estar dispuesto a liberar a Bout a cambio de Griner y el ex marine Paul Whelan, quien fue detenido en 2018 y desde 2020 cumple una condena de 16 años de cárcel, en la región de Mordovia, por cargos de espionaje que él rechaza.
Pero Moscú se cerró de bandas y finalmente solo permitió la liberación de la basquetbolista. Biden aseguró que su Administración seguirá «negociando de buena fe» la entrega de Whelan.
«Lamentablemente y por razones totalmente ilegítimas, Rusia está tratando el caso de Paul de manera diferente al de Brittney. Y aunque aún no hemos logrado asegurar la liberación de Paul, no nos damos por vencidos. Nunca nos daremos por vencidos», aseguró Biden.
Meet Brittney Griner & Marine Paul Whelan.
Both Americans.
Both were convicted in Russian courts on dubious charges.
Both serving multi-year sentences in Russian prison.
Brittney hates America
Paul served America
Guess which one Biden traded a terrorist to free?
Semper fi Paul pic.twitter.com/tuP1R6AZpf— Benny Johnson (@bennyjohnson) December 8, 2022
El ‘mercader de la muerte’ recupera su libertad
Entretanto, en suelo ruso obtuvieron a cambio la liberación del traficante de armas Víktor Bout, detenido en Tailandia en marzo de 2008 y extraditado a EE. UU en noviembre de 2010.
El hombre conocido como ‘el mercader de la muerte’ fue condenado por una corte de Nueva York, en abril de 2012, a 25 años tras las rejas, bajo el cargo de tráfico de armas.
El ministerio de Exteriores ruso señaló que su Gobierno «llevaba tiempo» negociando su liberación.
«Washington rechazaba categóricamente el diálogo sobre la inclusión del ruso en el esquema intercambio (…) Sin embargo, la Federación Rusa continuó trabajando activamente para rescatar a nuestro compatriota», señalaron desde esa cartera.
Bout fue arrestado después de que agentes estadounidenses, que se hacían pasar por integrantes de la ahora extinta guerrilla colombiana de las FARC, le tendieran una trampa en un hotel de Bangkok.
Desde entonces, Moscú ha reprochado fuertemente su detención, calificó su posterior condena de «infundada» e «imparcial» y señaló que haría «todo lo posible para que Bout regrese a su tierra madre».
Una promesa que se cumple ahora, 14 años después, en medio de nuevas tensiones entre Washington y Moscú por la guerra en Ucrania.
De hecho, el arresto de Brittney Griner se conoció públicamente luego de que Rusia lanzaran el conflicto contra su vecino país, el pasado 24 de febrero. La situación adquirió tintes políticos y aumentó las discordias entre las dos potencias luego de que EE. UU. impulsara las sanciones económicas e internacionales contra el Kremlin.
Reuters/ EFE/
