Yaxmin González Jiménez
ACARIGUA.- Aulas sin pupitres, instalaciones llenas de maleza y sistema eléctrico en mal estado son algunos de los elementos encontrados en el trabajo de contraloría social, efectuado por la dirección ejecutiva del partido Un Nuevo Tiempo en el municipio Páez, en diversas instituciones educativas de Acarigua, dejando en entredicho la efectividad de las llamadas Brigadas Comunitarias Militares para la Educación y la Salud (Bricomiles), creadas por el Gobierno para dar respuestas a las denuncias y solicitudes registradas en el sistema del 1X10 del Buen Gobierno.
Al respecto, el secretario de Organización de UNT-Páez, Alfonso Alvarado, señaló que “el tan cacareado plan de las Bricomiles se creó para dejar todas las instalaciones educativas como una taza de cristal, pero al parecer esa ‘gotica de amor” no ha llegado a la mayoría de los planteles dado el deterioro que presentan los mismos con filtraciones en paredes y techos, falta de pintura, canchas llenas de monte y comedores cerrados, entre otros aspectos”.
Alvarado se refirió al caso particular de la UEN José Antonio Páez, uno de los liceos más emblemáticos de Acarigua y Araure, de donde han egresado algunas de las autoridades que se encuentran en el poder. “No entendemos cómo es que en esta llamada revolución, las instituciones educativas, en todos los niveles, se encuentran en total decadencia en todos los niveles”, dijo.
El dirigente político lamentó que gran parte de esta situación es producto de los sueldos míseros de los docentes, quienes muchas veces no devengan ni para el traslado de sus casas al sitio de trabajo. “Recordemos que el pasaje de rapiditos tiene un valor de 15 bolívares y al mes representan alrededor de 750 bolívares, es decir, el salario prácticamente se les va en pasajes para ir a trabajar”. señaló.
