Miguel Enrique Villavicencio.- Según el criterio del doctor Rafael Narváez, exparlamentario y abogado defensor en materia de Derechos Humanos y Civiles en el país, el Tribunal Supremo de Justicia incurrió en los delitos de usurpación de poder y violación de la soberanía popular.
Comenta además que la decisión del TSJ es inejecutable por estar al margen de la Constitución e impregnada de parcialidad política.
Narváez rechazó la sentencia emanada de la sala electoral del TSJ, pues desde su punto de vista, esta carece de competencia para decidir el resultado de las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio 2024, por lo tanto es nula de toda nulidad.
Indica que el artículo 138 de la carta magna cita que toda autoridad usurpada es ineficaz y todos sus actos son nulos. De manera que esta decisión también acarrea responsabilidad de sus actores.
-Establece el artículo 139 que el ejercicio del Poder Público acarrea responsabilidad individual por abuso o desviación de poder o por violación de esta constitución o de la ley.
El jurista expresó que «estamos en presencia del aniquilamiento de lo más sagrado de un sistema democrático como lo es la soberanía popular que se expresó a través del voto para un verdadero cambio de gobierno.
La decisión del TSJ despoja a la ciudadanía de su soberanía incurriendo en otro delito muy grave contrariando lo que establece el artículo 5 de la Constitución que plasma, que «la soberanía reside instransferiblemente en el pueblo quien la ejerce mediante el sufragio».
Narváez exigió al TSJ regresar a su autonomía, independencia y atribuciones, tal como se lo exige la misma norma suprema.
