N UEVA YORK.- Tras décadas de amenazas de distintos grupos religiosos por sus escritos, el pasado 12 de agosto el novelista británico Salman Rushdie fue apuñalado en el cuello por un hombre mientras asistía a un evento literario en Nueva York.
Las primeras informaciones de la policía apuntaron a que el escritor fue acuchillado en el cuello, versión que medios locales confirmaron con testigos presenciales.
Su agente confirmó en la noche del viernes que el escritor se encuentra en estado de gravedad y con ventilación asistida. Asimismo, comentó que Rushdie podría perder un ojo tras el atentado contra su vida.
La policía, por su parte reveló detalles sobre el autor del ataque: un joven de 24 años llamado Hadi Matar de New Jersey, el cual tenía acceso al evento y que actuó solo, aunque no se saben los motivos y fue imputado por el cargo de intento de homicidio, sin derecho a fianza.
El abogado de oficio asignado al caso, Nathaniel Barone, informó a la agencia Reuters que el joven se declaró no culpable.
The accused attacker, 24-year-old Hadi Matar of Fairview, New Jersey, entered a not guilty plea at a court appearance on Saturday, his court-appointed lawyer, Nathaniel Barone, told Reuters.
Las autoridades de Nueva York están a cargo y aún no tienen detalles de lo que llevó a Matar a cometer el ataque contra Rushdie. «Hemos estado en contacto con nuestros homólogos en Nueva Jersey para compartir información e intentar comprender mejor la planificación y la preparación que precedió al ataque”, expresó la Fiscalía.
El Gobierno de Estados Unidos repudió categóricamente el hecho. «El país y el mundo fueron testigos de un ataque reprensible, un acto de violencia horroroso. Rezamos para que se recupere pronto», indicó en un comunicado el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
Por su parte, este sábado, el primer ministro de Canadá también expresó su condena al atentado contra la vida de Rushdie. «Es una afrenta a la libertad de expresión sobre la que se construye nuestro mundo. Nadie debe ser amenazado o lastimado por lo que escribió. Yo le deseo una pronta recuperación», tuiteó Justin Trudeau.
En horas de la mañana, algunas fotografías y videos en redes sociales dieron cuenta del desconcierto luego del ataque en pleno escenario en Chautauqua. En las imágenes se puede ver a Rushdie en el suelo recibiendo primeros auxilios antes de que fuera conducido de emergencia en helicóptero a un centro asistencial.
Un reportero de ‘Associated Press’ vio a un hombre subir al escenario y comenzar a agredir al autor justo en el momento en que subió al escenario. El perpetrador fue neutralizado segundos después de la agresión y detenido por la policía.
El escritor de 75 años estaba en la Institución Chautauqua para participar en una exposición sobre Estados Unidos como sitio de asilo para escritores y artistas en condición de exilio, “como un hogar para la libertad de expresión creativa”, según anunció el sitio web de la entidad.
Ciudadano estadounidense desde 2016 y actualmente residente neoyorkino, el golpe a Rushdie fue considerado “un ataque a la libertad de expresión y pensamiento” por el senador local Chuck Schumer.
En tanto que PEN America, un grupo de defensa de la libertad de expresión, dijo que era un acto sin precedentes en Estados Unidos. La directora ejecutiva actual, Suzanne Nossel, detalló que en la mañana del viernes estuvo en contacto por correo electrónico con él, trabajando en conjunto para reubicar a escritores ucranianos que buscan refugio.
Rushdie, un objetivo de Irán
Salman Rushdie ha sido blanco de intimidaciones por sus controvertidas obras durante décadas, sobre todo por ‘Los versos satánicos’, libro publicado en 1988 y el cual despertó la ira del mundo musulmán, en especial la del Gobierno iraní.
Desde Teherán se han mantenido en silencio luego de los sucesos que tuvieron lugar en Nueva York. Ni el Gobierno ni los líderes religiosos han reaccionado sobre el ataque contra el escritor.
Sin embargo, escasos medios han celebrado la noticia. El periódico conservador ‘Keyhan’ festejó el ataque y ofreció «100 bendiciones de Dios» al atacante. Por su parte, el diario Jorasán remarcó en su tapa que “Satán va camino del infierno”.
Nacido en una familia india musulmana, Rushdie debió enfrentar innumerables amenazas de muerte por su cuarta novela, la cual –según algunos musulmanes- tiene pasajes que consideran una blasfemia.
‘Los versos satánicos’ está prohibido en Irán desde su publicación, al igual que en naciones con una población numerosa de musulmanes.
Un año después de su publicación, el difunto líder iraní, el ayatolá Ruhollah Jomeini, emitió una fatwa (decreto) en la que llamaba a los fanáticos religiosos a matar al novelista.
Organizaciones iraníes, algunas afiliadas al Gobierno inclusive, recaudaron dinero y ofrecen una recompensa millonaria para cualquiera que mate a Rushdie.
Esta situación llevó a Rushdie a vivir escondido durante muchos años, a contar con protección policial y a usar el pseudónimo ‘Joseph Anton’. De hecho, en 2012 publicó las memorias sobre su vida con ese título. Su último trabajo, ‘Ciudad de la cictoria’, saldrá en febrero próximo.
En 1998, la Administración de Teherán de esa época comunicó que ya no respaldaba la fatwa, permitiendo que el novelista viviera relativamente sin preocupaciones. No obstante, el ayatolá Ali Khamenei ratificó en 2017 que la fatwa continuaba vigente.
El escritor es un acérrimo crítico de la religión en varios de sus aspectos. También ha sabido apuntar contra la opresión y la violencia que rondaba su India natal.
EFE/ Reuters/