BRASILIA.- A partir de la medianoche de este martes 16 de agosto comenzó la campaña política en el país sudamericano para lo que serán las elecciones presidenciales que se celebrarán en dos meses y que comprometen a 12 candidatos. Las primeras estimaciones revelaron una contienda polarizada con una ventaja unánime para el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, aunque Jair Bolsonaro ha mejorado sus números.
El aire electoral continúa respirándose en América Latina. Esta vez movilizado hacia Brasil, donde este martes 16 de agosto se le dio curso a la campaña política rumbo a los comicios que se desarrollarán el próximo 2 de octubre, donde también se definirán gobernadores y se renovará el Congreso.
Con el comienzo formal desde la medianoche, ahora los 12 candidatos que aspiran a la Presidencia podrán realizar reuniones y divulgar propaganda en las redes sociales, Internet y medios gráficos. Para la radio y la televisión el permiso arrancará dentro de diez días.
Las primeras encuestas fueron publicadas y mostraron que el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva lidera de manera unánime y con una diferencia considerable –oscila entre los 12 y 16 puntos dependiendo la encuestadora- sobre el actual mandatario, Jair Bolsonaro.
No obstante, el derechista ha mejorado sus cifras en los últimos meses, bajando los índices negativos, subiendo los positivos y zanjando las diferencias en los estados brasileños más importantes.
Según las estimaciones de IPEC (ex IBOPE), Lula tiene un 44% de intención de voto, 12% más que Bolsonaro para la primera vuelta. Mientras que, para una segunda, la cifra iría a 51-35 a favor del izquierdista.
Las encuestadoras coinciden en que los números favorecen a Lula, pero menos que hace unos meses. La imagen positiva del actual jefe de Estado subió a 29%, 10 más que en diciembre de 2021, en tanto que emparejó la diferencia en San Pablo y Minas Gerais, los dos distritos más poblados.
Lula, que estuvo en el poder entre 2003 y 2010, abrió su campaña con un video en sus redes sociales, donde pidió el apoyo de los votantes para “cambiar de nuevo la vida del pueblo”.
“El hambre volvió, la inflación está asustando a las familias y el salario mínimo mal da para pagar una canasta básica”, expresó.
Tanto Lula como Bolsonaro tienen programados actos simbólicos de peso como primer paso en la carrera rumbo al Palacio de Planalto. El oficialista irá a Juiz de Fora, lugar donde fue apuñalado en 2017 a pocas semanas de ser presidente.
“Invito a todos a participar en este acto cívico a favor de Brasil en la ciudad donde renací. Dios, patria, familia y libertad”, enfatizó el candidato del Partido Liberal.
Bolsonaro apunta a aumentar el gasto en asistencia social para las personas de menores recursos y presiona a la petrolera estatal Petrobras para que bajen los precios del combustible, un factor de inflación.
Por su parte, el aspirante del Partido de los Trabajadores (PT) anunció una visita a una fábrica de automóviles en la zona metropolitana de São Paulo, donde fueron sus orígenes en la política como líder sindical.
Tanto Lula como Bolsonaro tienen estipulado participar de la ceremonia de investidura del nuevo titular del Tribunal Superior Electoral (TSE), Alexandre de Moraes.
Pese a la polarización, hay una docena de candidatos
Lula y Bolsonaro protagonizarán la disputa por ser el próximo presidente de Brasil, pero aún así son 12 los que formalmente están en camino a las urnas. Las cifras de la intención de voto los ponen muy por debajo, sin que ninguno supere el 10%.
El más cercano es Ciro Gomes, del Partido Democrático Laborista, un abogado de 64 años de larga trayectoria política. En su experiencia ha sido alcalde, ministro, diputado y gobernador. Será su cuarto intento para la presidencia, aunque las estimaciones solamente le dan casi un 10%. Supo ser aliado de Lula, aunque luego terminaron enfrentados.
La centroderechista Simone Tebet –Movimiento Democrático Brasileño- tendrá su primera incursión en campañas presidenciales a los 52 años. Con orígenes en el sector agropecuario, apenas tiene un 2% de seguidores.
El resto de los candidatos no llega a un 1%. Entre ellos están Vera Lúcia Salgado (Partido Socialista de los Trabajadores Unificado), el empresario Felipe D’Avila (liberal), la senadora de derecha Soraya Thronicke (Unión Brasil), Léo Pericles (un mecánico de 48 años, Unidad Popular) y la comunista Sofia Manzano.
Dentro de la larga lista de candidatos aparece un hombre de 82 años, José Maria Eymael (Democracia Cristiana), el más longevo de los 12. Fue diputado federal tres veces e irá por un sexto intento por la Presidencia.
Los restantes son Roberto Jefferson (Partido Laborista, aliado de Bolsonaro, ex de Lula) y Pablo Marcal (35 años, Partido Republicano de Orden Social), aunque la candidatura de este último fue retirada por su partido para apoyar a Lula pese a la inscripción en el TSE.
EFE/ Reuters/