KIEV.- Este domingo 28 de agosto, la artillería rusa bombardeó ciudades al otro lado del río Dniepera, en las inmediaciones de la central nuclear de Zaporizhia, en el sur de Ucrania, denunció Kiev. En los últimos días las dos partes del conflicto se han acusado mutuamente de ataques cerca a la central, que aumentan el riesgo de un desastre nuclear. La planta se vio seriamente afectada la semana pasada por las explosiones a su alrededor, que la desconectaron del sistema eléctrico del país.
Aumentan los temores por un posible desastre radiactivo en la planta nuclear de Zaporizhia, en el sur de Ucrania y controlada por las tropas rusas.
Kiev acusó este domingo 27 de agosto a Moscú de reanudar bombardeos desde la central nuclear hacia las localidades y ciudades cercanas.
El gobernador de la región, Oleksandr Starukh, aseguró que las acciones rusas alcanzaron edificios residenciales en la ciudad principal de la región, Zaporizhia, a unas dos horas en automóvil de la central eléctrica, y en la ciudad de Orikhiv, más al este.
En su informe diario, el Ejército del país atacado informó de asaltos en otros nueve pueblos en el área circundante de la planta, ubicada en la orilla opuesta al río Dniéper.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Defensa del Kremlin, Igor Konashenkov, confirmó embestidas de las fuerzas ucranianas alrededor de la instalación de energía, en las últimas 24 horas. Aseguró que nueve proyectiles disparados por la artillería de Kiev en dos ataques separados impactaron en la planta de energía nuclear.
«Actualmente, el personal técnico está monitoreando el estado técnico de la central nuclear y asegurando su funcionamiento. La situación de radiación en el área de la central nuclear se mantiene normal», agregó la cartera rusa en un comunicado.
Estos señalamientos no han podido ser verificados de forma independiente. Hasta la próxima semana se espera la visita en el lugar de una delegación del Organismo Internacional de Energía Atómica de la ONU (OIEA). El comité se encuentra en espera de un permiso para visitar el sitio.
Las dos partes vuelven a acusarse mutuamente, mientras el riesgo por un desastre en la central atómica es cada vez más preocupante.
Bajo control de los militares extranjeros desde el pasado marzo, pero aún dirigido por personal y expertos ucranianos, el complejo en la línea del frente sur de la guerra es uno de los principales puntos críticos en el conflicto de seis meses.
Tanto la Organización de Naciones Unidas como Kiev han pedido el retiro de equipo y personal militar de la planta para evitar que se convierta en un objetivo.
La UE suspendería visas de turismo a ciudadanos de Rusia
El diario británico ‘Finantial Times’ reportó que la Unión Europea (UE) suspenderá su acuerdo de visas con Rusia esta semana.
El plan tiene previsto congelar el acuerdo de 2007 con Moscú, lo que hará que sea más difícil y costoso para los ciudadanos rusos obtener documentos para transitar por el área Schengen.
“Como primer paso, los ministros planean dar apoyo político a la suspensión del acuerdo de facilitación de visas UE-Rusia, en una reunión de dos días en Praga que comienza el martes (30 de agosto)”, señaló el diario que citó a tres funcionarios involucrados en las conversaciones.
La medida entraría en vigor luego de que algunos Estados de Europa del Este amenazaron con cerrar unilateralmente sus fronteras a los turistas rusos, y otros países pidieron una acción colectiva para evitar que los ciudadanos de ese país viajen a la UE con visas de turista.
Anteriormente, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, pidió una prohibición total en esta materia.
“Es inapropiado que los turistas rusos paseen por nuestras ciudades, por nuestros puertos deportivos. Tenemos que enviar una señal a la población rusa de que esta guerra no está bien, no es aceptable”, afirmó un alto funcionario del bloque europeo.
Desde finales del pasado febrero, cuando el presidente ruso Vladimir Putin ordenó la guerra contra su vecino país, partes del acuerdo de 2007 relacionadas con la libre circulación de funcionarios gubernamentales y empresarios fueron suspendidas.
Una cancelación más amplia eliminaría el trato preferencial para los rusos al solicitar todas las visas de la UE, lo que requeriría más documentos, haría el proceso más costoso y aumentaría significativamente los tiempos de espera.
Reuters/ AP/