Yaxmin González Jiménez
ACARIGUA.- Al cumplirse este jueves el 15° aniversario de la promulgación de la Ley Orgánica de Educación, el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (Site), filial de Fetrasined, considera que el Estado venezolano sigue en mora con el magisterio al no darle el piso necesario a esta normativa para mejorar el ejercicio de la docencia en el país.
«Seguimos a la espera que el Gobierno nacional haga a la sociedad en general una propuesta del Reglamento General y de las diferentes leyes especiales que establece la Ley Orgánica de Educación, que dé respuesta a los interesesy necesidades de todos los factores que están involucrados como lo son los estudiantes, los trabajadores los padres y representantes y por consiguiente la sociedad en general y de esta manera deje de estar en mora legislativa y en deuda con el magisterio y el país», sostuvo el presidente de la organización sindical antes señalada, Iván Bravo.
Explicó que este instrumento jurídico, que consta de cincuenta artículos y las Disposiciones Transitorias, Derogatoria y Final, sería complementado con reglamentos y leyes especiales que estarían orientadas a darle definición, profundidad y propósito en aspectos como «la duración, requisitos, certificados y títulos de los niveles del subsistema de educación básica; Educación Básica; formación de los docentes; regulación de la carrera docente y la particularidad de los pueblos indígenas; estabilidad en el ejercicio de la carrera docente; relaciones de trabajo y jubilación; evaluación educativa; modalidades del sistema educativo; régimen escolar, entre otras normativas legales que vendrían a organizar, estructurar y desarrollar el Subsistema de Educación Básica del país».
El representante gremial considera que si al Ejecutivo nacional realmente se ocupara de la educación venezolana «además, de redactar estos reglamentos y leyes especiales buscaría mejorar las condiciones socioeconómicas de los docentes asignándoles un salario justo y seguridad social, que nos permitan tener una buena calidad de vida, de manera de encaminarnos hacia una verdadera calidad educativa».