ESPECIAL. – A juicio del profesor Edgar Rivero – presidente regional de Un Nuevo Tiempo, «pese a la persecución política existente y a la estrategia del gobierno de desmovilizar nuestros cuadros dirigenciales, es imperativo permanecer activos, organizados, ya que existen razones de peso que nos obligan a mantener la articulación indicada con la gente aguas abajo».
-Claro está, indistintamente del alarde de quienes hoy ostentan el poder en Portuguesa, gastando cuantiosas sumas de dinero en el tema comunicacional para celebrar logros parciales en la mejora de los servicios públicos de nuestra entidad, queda mucho por hacer. He aquí el llamado de atención al resto de la dirigencia política opositora. Más aún, cuando el Estado tiene la responsabilidad de garantizar que las personas vivan con dignidad y calidad de vida, agregó.
«No se trata de repetir o afirmar que tenemos un “gobernador ejemplar”, o en su defecto apelar a la rimbombancia que puedan producir el uso excesivo de las redes sociales en determinado momento para evidenciar el trabajo que le corresponde, se trata de romper el celofán de las promesas incumplidas o quedare en la celebración de logros parciales, se trata de tomar acciones concretas para mejorar las condiciones de vida de todos los ciudadanos» prosiguió diciendo el dirigebtr opositor.
Por consiguiente -añsdió- esto amerita generar políticas públicas que promuevan salarios justos y competitivos, reactivar la producción nacional para estimular la economía y sobre todo, invertir en la mejora de los servicios públicos. Una entidad donde los ciudadanos tengan que protestar a cada momento para acceder a derechos básicos no es de un país que esté cumpliendo con su deber.
-La calidad de vida no se puede concebir como un lujo, como una exigencia exclusiva de la derecha opositora o algo parecido, es una necesidad básica que el gobierno de turno tiene la obligación de asegurar. Los portugueseños merecen un estado donde se les valore, donde puedan vivir sin la constante angustia de no saber si tendrán luz eléctrica, agua o suficiente dinero para alimentar a sus familias, aseveró más adelante.
Es hora -dijo finslmente Rivero- que el Estado asuma su responsabilidad y actúe en beneficio de todos, sin distinción partidista. Solo así podremos comenzar a construir el país que todos merecemos, uno donde la dignidad y la calidad de vida de los ciudadanos sean la prioridad